En otro orden de cosas, he intentado dejar pasar unas horas para ver si se me pasaba el supremo cabreo que pillé ayer con la final de la Euroliga… pero no. En primer lugar, con el bueno de Niko Mirotic; jugador de una clase excepcional que, por salario, condiciona totalmente la confección de la plantilla, […]
El cabreo y la final de la Euroliga
