Había que esperar el resultado del Madrid en Mallorca para decidir la alineación que saltaría al antiguo Ramón de Carranza: si los blancos pinchaban y ante la inminencia del clásico de la próxima semana, la liga podría quedar abierta. No fallaron los de Ancelotti y Xavi priorizó, como no podía ser menos, el acceso a unas jugosísimas semifinales de Champions. Revolución absoluta en el once, carro del pescado y minutos para los menos habituales. Tan solo la presencia de dos imprescindibles: Ter Stegen y Cu-Cu-Cubarsí, ese neo Maldini que el técnico se ha sacado de la manga.
La victoria en Cádiz se hacía necesaria –el segundo puesto sigue sin estar asegurado– pero tampoco imprescindible. Y los jugadores lo sabían y el juego lo notó. Con la mente en Europa, nadie en sus cabales podría apostar por un excelente partido de los azulgrana sino por algo funcionarial. Y así fue. Lo único reseñable es que el equipo confirmó que está ya más en modo “temporada pasada” que en “temporada actual”. Ha vuelto la solidez defensiva –son ya 6 partidos sin encajar un gol en liga– y así, sin grandes alardes, se apeló a la gran frase de Fernando Arrabal: “el unocerismo va a shegaaaar”. Y llegó.
Sin apenas haber creado ocasiones pero con el control del partido, a la salida de un córner, el balón quedó suspendido en el aire y Juan Infeliz dibujo una bonita chilena en el aire –idea 10/10– pero cuya finalización fue tibiesca, tirando a pobre –ejecución artística 5/10–. Mejor dramatización artística fue la de Iza, el defensor del Cádiz, llevándose las manos a la cara cuando el pie del portugués le había pasado a no menos de un metro de su cara. Hay gente que mentalmente vive aún en 2010, cuando aún no había VAR. El caso es que la chilena terminó en la red. Y casi se puede decir que ahí terminó el partido. Pudo sentenciarlo por completo antes del descanso Fermín, el que nunca se cansa, pero su disparo fue sacado bajo palos por la defensa gaditana.
Estaba claro que estábamos ante un partido “arroz- blanco-con-pechuga-de-pollo”. Insípido pero que sabes que no te va a sentar mal y al menos te alimenta. Y es que en la reanudación, el partido daba la sensación de uno de primera ronda de Copa ante un 2ª RFEF y el único interés radicaba ya en analizar si alguno de los suplentes, podría aportar algo de cara al partido del martes. Quedó claro que no. Tractoriol no es capaz de subir su nivel ni ante un rival en puestos de descenso, y encomendar tu ataque a O Tiburao do Foios y a Vitor Kodroque es poco menos que poner 6 números consecutivos en la Primitiva y esperar que te toque.
Las entradas de Lamine, Pedri y Koundé solo sirvieron para contemporizar el juego y llegar sin sobresaltos al final del partido, a excepción de una mano portentosa de Ter Stegen para recordar como lastraron al equipo esos meses con Iñaki Dandopena en la portería. Sin hacer nada descomunal, el Barça fue mejor que un equipo mucho peor. Con más partidos de este tipo durante la temporada, tal vez el próximo Clásico del Bernabéu hubiera sido otra historia.
COROLARIO: YOYABRAVAS
En La Esquinica de la ciudad que porta el nombre del nostro clum, se reunió parte de la plana mayor del Yoya encabezados por Diplomat y Comadante Bond. Secundados por Severain, Hiei, Sobrequeso, Joshua Acosta y quien suscribe. Franzcopen, que amagó con hacer acto de presencia, finalmente se echó atrás cual fichaje de Drogba. Entre la decoración, un cuadro con una foto de un jugador perico se cernía, amenazante, sobre la cabeza de Joshua. No llegó lsa sangre al río. Tras las quejas preceptivas de Sobrequeso ante el soleado día que se cernía sobre la ciudad condal, se acompañó la sesión de control y debate sobre el estado del club con unas jarras de cerveza y un menú que incluía las esperadísimas bravas, chistorra, chopitos y calamares a la romana. Un menú que seguramente no aprobaría el gourmet Vaillet pero que satisfizo a los allí presentes. Numerosos temas sobre la mesa: ¿Debe continuar Xavi? ¿Fue justa la salida de Messi? ¿Cuánto vale Cu-Cu-Cubarsí? ¿Aguantará el cinturón de Laporta semejante presión barriguil? ¿Nos gustan las películas de gladiadores? ¿Qué fue de la cuñada de Hiei? Por supuesto, no se llegó a ninguna conclusión definitiva y todas las preguntas quedaron sin respuesta. Ante la insistencia del camarero, se procedió a una segunda ronda (tercera en el caso de las cervezas) que, además de las bravas, incluyeron calloj, en lo que fue un homenaje claro a Don Carajillo Trolez. Gran ambiente y se insta a los allí presentes a convocar estas reuniones con más frecuencia: ha habido más Xempions del club que Yoyaquedadas.