A mis compañeros del Yoya,
Después de ser derrotados en diversas emboscadas,la consecución de la liga está más difícil que nunca, pero incluso si no pudiéramos ganar esta batalla no debemos pensar en que la guerra está perdida.
Recordemos que nuestro enemigo planteó su estrategia a corto plazo, y siendo aniquilado claramente la campaña pasada, planificó para ésta una blitzkrieg buscando el KO en el primer asalto y ganar la guerra por la vía rápida.
Recordemos, a pesar de los problemas de moral que recorren nuestras filas, que el excelente rendimiento de los nuestros durante el primer trimestre (tres títulos conquistados y a un paso del cuarto) ha destrozado las expectativas del generalísimo enemigo. Y que él es el primero que tiene claro que podría acabar la campaña actual con una sonora derrota, incluso ganando la Liga.
Recordemos que esta guerra va a durar diversas campañas y sobre todo recordemos que nada está perdido, y que incluso perdiendo la liga tenemos grandes posibilidades de ganar la temporada 2011-2012.
¡Nuestros jugadores han vencido -y vencerán- porque están acostumbrados a las batallas decisivas! Descienden directamente de aquellos que hace cuarenta años arrasaron al enemigo en su propio feudo y de aquellos otros que hace veinte plantaron nuestra primera bandera en la lejana tierra de John Bull.
A esas maravillosas páginas en la historia de nuestro club ha seguido una aún más gloriosa. Por ello en las victorias de hoy el nieto invoca a su abuelo fallecido y mientras una lágrima resbala lentamente por la mejilla murmura unas palabras de gratitud por haberlo hecho culé, y otras de orgullo y de respeto por haber resistido en los años de travesía del desierto.
¡Todos a las armas! ¡Todos! Y los caciques y los prepotentes se desvanecerán como polvo.
Lanzad bien lejos el miedo, que los pusilánimes se vayan a otra parte a arrastrar su aprensión, sus miserias. ¡No temáis a los cobardes que con infamias y amenazas conspiran para conseguir con malas artes lo que no logran venciendo en el campo! ¡Este equipo es dueño de sí mismo! No irá a remolque de los hombres de corazón de fango. ¡No! ¡No! ¡No!
La Providencia reservaba el don de Pep Guardiola al Barça. Todos los culés deben reanimarse junto a él. Todos los culés deben ampararlo, resguardarlo tras de nuestra muralla. A su lado toda división debe desaparecer, todos los rencores disiparse.
Una vez más repito mi clamor: ¡Todos! ¡¡Todos a las armas!!
Si el mayo de 2012 no está jalonado de victorias culés … ¡Pero No! Lanzo lejos de mí un pensamiento que me es repugnante como un veneno. En mayo de 2012, y en febrero, si es necesario, todos estaremos en nuestro lugar. Yoyeros catalanes, castellanos, gallegos, valencianos, andaluces y de allende el océano. Y con nosotros todos los culés que no sean cobardes, que no sean serviles.
Todos, todos reunidos alrededor del soldado glorioso de Rosario, daremos la última sacudida, el último golpe al caciquismo merengón!
Regresen a sus hogares sólo aquellos llamados por las obligaciones familiares, padres recientes. Sirvan al Barça aún en sus casas dando consejo y mostrando con orgullo las cicatrices que decoran su cuerpo con honor. Aparte de éstos, los demás permaneceremos en guardia con nuestras banderas gloriosas.
Nos reencontraremos en breve para marchar juntos por la redención de nuestro equipo, sea incluso en el extranjero.
Nos reencontraremos en breve para celebrar juntos las nuevas victorias.
Giuseppe Bacteri Garibaldi