En estos días se habla de personas que han presentado su candidatura a la presidencia del F. C. Barcelona, se intentan valorar sus virtudes y defectos, se les compara con el presidente actual y con otros que ya hace años que abandonaron el cargo. Ellos intentan venderse como salvadores sin los cuales el Club se iría a la ruina.
Mientras,los socios seguimos reflexionando e intentamos dilucidar cual es la mejor opción para el Barça, me apetece hablar de un Presidente sin el cual nuestro club no existiría y no solo porque fue su fundador sino por los sacrificios que hizo para mantenerlo a flote, el mejor Presidente de la Historia del F.C. Barcelona, Joan Gamper Haessig.
No pretendo hacer una biografía del personaje, para eso hay personas mucho más preparadas que yo, sino un recordatorio de algunas de las cosas que hizo para salvar al Club.
Gamper era un gran deportista, de adolescente destacaba como ciclista, practicando también con gran acierto el futbol en su Suiza natal ( fue el mejor delantero del Excelsior antes de fundar el F.C Zurich) y el rugby cuando se trasladó a Francia, concretamente en la Union Athletique de Lyon.
Por eso, no es de extrañar que, cuando llegó a Barcelona, con 20 años de edad, tuviese ganas de practicar su deporte favorito, el futbol. Tras asentarse definitivamente en la Ciudad Condal aglutinó a parte de la colonia extranjera y creó el F.C.Barcelona a partir de un anuncio en prensa, concretamente en la revista “Los Deportes” en el cual solicitaba aficionados al deporte del Foot-Vall para organizar partidos en la ciudad.
La mayoría de los que se presentaron eran de la colonia extranjera con algunas excepciones como Pere Cabot, Carles Pujol o Josep Llobet.
En un principio, Gamper no presidió la entidad sino que el primer mandatario fue el inglés Gualteri Wild. En aquella época todos los socios, incluso Wild, eran jugadores del equipo, Gamper jugaba de delantero, siendo el máximo goleador en 1901, marcando 49 goles del total de 88 que consiguió el equipo.
Tras unos primeros años de crecimiento del Club, vinieron épocas de vacas flacas que empezaron en la época de la Presidencia de Josep Soler con diversas cacicadas de la Asociación de Clubs que llevaron a una inactividad social, crisis deportiva y un descenso del número de socios hasta 198.
No mejoró la situación con los 2 años de presidencia de Juli Marial y menos con la de Vicenç Reig. Este último solo soportó la presión del cargo 22 días tras los cuales presentó la dimisión en Asamblea Extraordinaria ante los 38 únicos socios que quedaban en el Club.
En esta Asamblea empezó la primera de las 5 presidencias de Joan Gamper, un hombre de marcado catalanismo (se cambió el nombre de Hans a Joan, aprendió antes a hablar catalán que castellano y escribía todos sus discursos en la lengua propia de Catalunya) y totalmente integrado a la vida del país. Al finalizar la reunión, el jugador Wallace preguntó: “¿No hay nadie que se atreva a levantar el Club? Si hay alguien, todos los jugadores le apoyaremos.”
En aquel momento, Gamper tomó la palabra con energía:
“El Barcelona no puede morir ni tiene que morir. Si nadie lo intenta yo solo asumiré la reponsabilidad de encargarme del club a partir de ahora .Estoy seguro que estarán a mi lado todos los que, en aquellos tiempos en que el futbol era algo extraño y que la gente veía con desconfianza, no vacilaron a la hora de apoyarme y secundarme. En este momento, quiero olvidar los agravios y desconsideraciones recibidas que motivaron mi alejamiento de la vida interna del club, para reclamar un puesto en la lucha que todos emprenderemos para reanimarlo. Si alguien me quiere secundar, que lo diga.”
Tras este discurso, fue elegido Presidente por aclamación.
Los 5 mandatos:
1908-1909
Se recuperaron antiguos socios de la entidad acudiendo a sus casas, puerta por puerta llegando con prontitud a la cifra de 200.
Se volvió a tener un equipo ganador, conquistando el campeonato de Catalunya sin perder un solo partido.
Viendo la necesidad de tener un campo propio, se construyó el de la calle Industria.
Tras 322 días de mandato, abandonó la Presidencia aunque siguió en la Junta Directiva.
1910-1913
A petición de los socios, volvió a asumir el cargo en una época convulsa por los inicios del profesionalismo y las antipatías de la Federación Española.
Al final de la temporada 12/13, el Barça se dió de baja de las federaciones catalana y española harto de agravios y de polémicas. Gamper dejó la Presidencia.
1917-1919
Ya con el mundo del futbol bastante profesionalizado, volvió a coger las riendas para reflotar la entidad. Fichó al primer entrenador profesional de la historia del Barça, el inglés Jack Greenwell y, en 1919, llegaron al club 2 mitos del barcelonismo, Zamora y Samitier.
Una vez superados los problemas, volvió a abandonar el cargo.
1921-1923
En unos años de bonanza, Gamper vuelve a ser Presidente por cuarta vez.
En el año 1922, el propio Gamper efectuó una donación de 1 millón de pesetas ( tengamos en cuenta de que época hablamos) para la construcción del nuevo terreno de juego.
En ese mismo año se consiguen los Campeonatos de Catalunya y de España pero, lo más importante de este mandato fue la inauguración del campo de Les Corts.
Vuelve a marcharse en el año 23 dejando tras de sí una economía envidiable y la cifra de 10.000 socios.
1924-1925
Volvió a coger el mando para aliviar ciertas tensiones en el seno del Club justo antes de celebrar el 25º aniversario del Barça.
En diciembre de 1925, él y toda su junta fueron obligados a dimitir por el abucheo del público al himno español y el aplauso al británico. Les Corts fue clausurado durante 6 meses.
Joan Gamper fue obligado a abandonar España por la dictadura de Primo de Rivera. Al cabo de un tiempo le permitieron volver, eso sí, prohibiéndole cualquier vinculación con el Club.
Estos acontecimientos le sumieron en una depresión que hizo empeorar su estado de salud.
En 1930, coincidiendo también con el “crack” económico que afectó a su empresa, el Presidente Gamper se suicidó.
Años más tarde, en pleno proceso de construcción del Camp Nou, el FC Barcelona pensó en bautizar con el nombre del Fundador del Club al nuevo estadio. La dictadura de Franco lo prohibió, según el historiador Manuel Tomás, por los siguientes motivos: “Por tratarse de un ciudadano extranjero, haberse suicidado,ser protestante, masón, abiertamente homosexual, tener ideología liberal y afín a la corriente catalanista”
En 1966, bajo la presidencia de Enric Llaudet se creó el Trofeo que lleva su nombre y en el año 2006 se inauguró la Ciudad Deportiva Joan Gamper en Sant Joan Despí.
Poco más se puede decir,los hechos objetivos hablan por si solos. Casi nadie ha hecho tantos sacrificios por el Club.
Me gustaría finalizar con un pequeño comentario, el catalanismo del Barça no ha sido un invento de Laporta, forma parte de nuestra historia y, la mayoría de socios y aficionados “tant se val d’on venim, si del Sud o del Nord” nos sentimos orgullosos de él.