Cuando el Barça saltó al césped de Paris con Sergi Tormento de titular y ejerciendo de capitán, muchos culés firmaban que MeFlipé solo hiciera un doblete. Que el Barça compitiera y no hiciera un nuevo ridículo en Europa. Y que al menos llegase al partido de vuelta con mínimas opciones de disputar la eliminatoria. Pensamientos consecuencia de una temporada irregular y que dejaba dudas un partido tras otro. Pero en el momento más oportuno, el equipo se despachó con la mejor actuación de la era post-Messi en un partido de auténtico primer nivel. Copa y Supercopa no cuentan como tal.
Pero, pese a comenzar dominando a través de la posesión, el P$G apenas generaba peligro con el Barça nuevamente apoyado en un Cubarsí imperial. Las ocasiones más claras, empero, caían del lado visitante con claro protagonismo para Nadinhabsolutinha. El brasileño aprovechó una buena jugada de Lamine El Chaval y que Donnaruma decidiese adelantar la época de la vendimia- cada vez más sobrevalorado el italiano- para marcar casi a puerta vacía. Suena fácil pero no lo es tanto si te llamas Raphinha. El gol le sirvió para coger confianza y puntería y así firmar sus mejores cuarenta y cinco minutos de azulgrana.
Buen resultado y mejores sensaciones al descanso, pero era de esperar la salida en tromba de los parisinos. Y así fue. La habitual empanada barcelonista de esta temporada al comienzo de cada parte es conocida por todos. Incluso por un Empanado XXL Premium. Decir que, contra todo pronóstico, marcó DembeLerdo sería faltar a la verdad. Si hay un equipo en el planeta que sufre la ley del ex, ese es el Futbol Club Barcelona. Y pese a que Ousmané hizo un anodino partido como los cientos que hizo en su etapa culé, no había dudas de que el extremo marcaría contra su ex equipo. De la nada, se sacó un potente chut que clavó por la escuadra. Sabido es que si en frente hubiera estado el Arsenal, el Niza o el Lokomotiv, ese balón habría acabado en el río Sena.
La empanada azulgrana se prolongó unos minutos más, los suficientes para que Vitinha pusiese por delante a su equipo. Momentos de zozobra. Equipo contra las cuerdas. Recuerdos de goleadas pasadas agolpadas en la mente. Pero, en ese preciso momento, el equipo hizo click. Por fin. Y ahí estuvo la gran noticia: que no solo aguantó esos malos momentos, sino que cual Lázaro futbolero se levantó y comenzó a andar de nuevo. Algo que no sucedía desde hace más de un lustro.
Era el día en el que todos los jugadores estaban dando un paso adelante y el entrenador no podía ser menos. Si ya su planteamiento de entrada superó al de Luis Enrique además, Xavi acertó con los cambios: las entradas de Juan Infeliz y Pedri apenas tardaron un minuto en surtir efecto. El canario asistió de manera magistral a Nadinhabsoluthina que, enrachado, marcó su segundo gol. Cerca de Notredamme, se produjo el advenimiento de un jugador que tras costar 60 minolles, aún debía demostrar que había valido la pena gastárselos. Bienvenidos a la Iglesia Raphinica de los Santos Goles. Os amamos, hermanos. Con apenas un partido jugado en Francia, los fríos números ya le sitúan a tan solo seis goles de los que marcó Dugarry en tres años allí. ¡Tiembla Christophe!
El empate era bueno, sí. Pero la positiva inercia del equipo le llevó a no conformarse. Algo que también se echaba de menos. Y la fortuna del técnico catalán no iba a acabar en la primera ventana de cambios. Un cuarto de hora después, replicaría su acierto dando entrada a Christense para que a la salida de un córner, el danés aprovechase la no-salida de Donnaruma. Su primer gol en la temporada. No pudo escoger un momento mejor. El apretón final local solo se tradujo en una buena ocasión de Roncola que Araujo desbarató. Soberbio el uruguayo, al nivel de todos sus compañeros de zaga.
La última vez que el Barça marcó 3 goles fuera de casa en una eliminatoria de Champions fue en 2015 en este mismo escenario y entrenado por Luis Enrique. Y se acabó ganando la Champions. ¿Y si este grupo de jugadores es mejor de lo que ha estado mostrando a lo largo de la temporada? ¿Y si el golpe de efecto de Xavi con su dimisión en diferido formaba parte de un plan premeditado? ¿Y si MeFlipé vuelve a estar desaparecido? ¿Y si Nadinhabsolutinha finalmente tiene nivel para estar en el Barça? La respuesta final, en menos de una semana si el equipo confirma las buenas sensaciones en la vuelta.