Anoche, en la previa del partido hubo marea de esteladas en el Camp Nou recordándole a la UEFA un derecho que deben tener olvidado por el poco uso: la libertad de expresión. Por lo demás, no creo que sirva para mucho y, seguramente, quedará el informe de lo de ayer en el disco duro hasta que puedan volver a sancionar de nuevo al Barça. Es lo único que les interesa: la pasta.
Respecto al partido, el Barça volvió a dar una buena imagen y tuvo buenos momentos de juego, especialmente en los pies del gran Busi (no me cansaré de admirarlo) y del recuperado Iniesta que le da sentido a todo el juego del equipo. Arriba están los de siempre, el bidente(?) que, como buenos alquimistas, convierten en oro todo lo que tocan a la espera del gran Merlín que sigue en camino de su total recuperación.
Lástima lo de Rakitic que, agotado por casi duplicar minutos respecto de la temporada pasada, cayó por una lesión de sóleo que puede que le aparte del clásico.
Yendo al partido, la primera parte fue de menos a más e incluso el BATE tuvo su ocasión en una falta que sacó MATS con una buena parada. Después vino el churripenalti a Alves que, por falta de costumbre, extrañó a toda la concurrencia. Lo cierto es que Neymar no falló y encarriló el partido para tranquilidad de todos. Solo destacar al final de esta primera mitad una frivolité de MATS yendo a por un balón casi al banderín de córner. Su técnica le permitió salir del embrollo pero está claro que no aprende. Genio y figura…
La segunda parte tuvo ya grandes momentos de juego, a primer toque y triangulando hasta que, en dos contras, el charrúa primero y luego Neymar resolvieron el partido de forma conveniente. Mi conexión de acestream no me ofreció una buena repetición del pase a Suárez en el tercer gol , pero diría que estaba algo adelantado. Por lo demás, a destacar, de nuevo, la contundencia de Luisito que tiene afinado su revólver. Ya casi no se echan de menos los goles del más grande.
En definitiva, un partido en el que el Barça fue superior, cumplió su objetivo de dejar la clasificación para octavos a falta de un punto con dos partidos por delante que nos permitirá jugar el último en Leverkussen con el equipo que “triunfó” en Villanueva de la Serena. Nos vendrá bien.
Ya se acaba esta travesía del desierto, tras el infausto 26 de septiembre, y parece que los daños son mínimos y se podrá encarar el clásico con bastante tranquilidad y sin agobios con respecto a la presencia de Messi. Queda tanto, todavía.