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Crónica

Return to Sender

 

 

El Barça anoche volvió al camino que perdió aquél fatídico 26 de septiembre. Más de un mes después, el juego del equipo recuperó las señas de identidad y convirtió una salida peligrosa, como suele ser la del campo con el nombre del jugador que era del Barça desde pequeño, en un simple trámite.
Para ello, el entrenador dispuso ayer, por primera vez desde hace semanas, de una plantilla más extensa que permitió poner a cada cual en su sitio recuperando un equilibrio perdido y, por otra parte, los jugadores pusieron la seriedad que hay poner para ganar en estos campos tan antipáticos.
El resultado fue un partido solvente en el que Bravo fue un mero espectador (ya era hora) y en el que, desde el primer minuto, ya se vio que el equipo acabaría ganando.
Así, el partido fue un monólogo culé desde el pitido inicial y bajo el mando del mariscal de campo Sergio Busquets, escoltado por un magnífico Sergi Roberto, en el que el Barça se hizo dueño y señor de la pelotita amarilla y roja. Era cuestión de tiempo que los dos de arriba la liaran.
Como quien no quiere la cosa y por mera ley de la gravidez se sucedieron las aproximaciones hasta que un Neymar, muy activo de nuevo, dio un pase por arriba a Roberto que lo convirtió en asistencia de gol con un sutil toque de espuela y Suárez definió con maestría al palo del portero convirtiéndolo en el mejor gol de la jornada (a pesar de que en Madrid dirán que es el de Jesé). Cuando juegas bien es lo que pasa: te sueles adelantar en el marcador.
La segunda parte volvió a ser un recital blaugrana, sin la brillantez que le ofrece Messi al juego pero con muchísima seguridad y solvencia en todos los aspectos. Como no lo suelo hacer, destacaré atrás la seguridad de Mathieu que, favorecido por el buen partido de sus compañeros, ganó un par de sprints importantes a los delanteros azulones.
El Getafe quiso apretar y forzó un par de córners un poco extraños, colocando a mucha gente en el área pequeña. En el último, que lo cogió Bravo, viendo lo solo que quedó Sergi Roberto, lanzó una contra que interpretó el reusenc a la perfección dando una gran asistencia a Neymar que la convirtió de volea en el segundo gol del partido y, de paso, a él en pichichi de la competición.
Pues eso, que tras la travesía del desierto contra equipos menores parece que hemos recuperado el camino situando a los jugadores en su posición, especialmente en la posición de mediocentro. Ahora viene un partido, esperemos, fácil contra el BATE, aunque  importante, y el último, hasta el nuevo parón, contra un siempre peligroso Villarreal. Espero ver a Messi aunque sea jugar unos minutos en la segunda parte. Return to Sender.