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Yoyalodije

Henry

Henry ha sido uno de los futbolistas que más me ha hecho disfrutar en mi vida. Ya con el Arsenal, sus partidos eran cita obligada todos los fines de semana. Y el francés, junto a los Bergkamp, Pires y compañía, poquísimas veces decepcionaba.

Su fichaje por el Barça fue, por lo tanto, casi un sueño hecho realidad. Una de esas incorporaciones que marcaban esa línea de grandeza ahora hace ya tanto tiempo perdida, que nos hacía mejores dentro del campo y que nos daba dimensión universal. Lástima, efectivamente, de ese año extra que le regaló a los gunners, que costó dinero y un cierto sentimiento de ser segundo plato, bastante amargo, por cierto. Una pena también que llegase a un equipo en plena autodestrucción, donde su calidad y su buen hacer pasaron bastante desapercibidos. Exactamente lo mismo que pasó, por cierto, con dos bestias como Abi y la Yaya. Y sí; una pena también que en el recuerdo pese tanto aquella vergüenza del Emyrates.

Sin embargo, ya digo: el de Henry es uno de esos caso en los que ‘lo bueno’ acaba pesando muchísimo más que ‘lo malo’; porque es uno de los grossos, GROSSOS en esto de darle pataditas a un balón, porque como dice el gran Oskarra, formó parte (importantísima) del equipo más bello (que no el mejor) que jamás hayamos visto, y porque siempre es motivo de orgullo que gente de este nivel vista nuestra camiseta, y después además haga gala de ello ante las cámaras y micrófonos.

P.D: también he de decir que si hablamos de rendimiento puro, el año 2010-11 de Villa me parece mejor que cualquiera de los de Henry, y que si hablamos de números, este año Neymar lleva camino de superarle amplísimamente (en un equipo infinitamente peor, lo cual le da aún más mérito)… pero ese es otro debate que ahora no viene a cuento.