El Barça no mereció perder en Getafe. Aunque hizo un partido bastante gris, no difirió mucho del jugado en Granada o Gijón, la única diferencia es que ayer no hubo acierto cara a gol y que algunas circunstancias no fueron del todo favorables.
Con una equipación que llevaba bastante a la confusión y tras la fiesta de San Siro, el Barça volvió a una defensa de cuatro y una delantera con dos extremos muy abiertos para intentar el desequilibro por bandas para que decidieran los que entraban desde la segunda línea.
Hubo una variante táctica en el centro de campo, Xavi ocupó de salida el medio centro y Busquets el interior derecho, dejando a Thiago el interior izquierdo, en una variación buscando sorprender al Getafe, pero ocurrió lo no deseado y al Barça le costó entrar en el partido, de tal modo que hasta pasada la media hora no hubo una clara ocasión de gol. En los últimos quince minutos de la primera parte el Barça pudo y debió resolver el partido pero la falta de acierto de Alexis, y alguna mano de Moyá dejaron la resolución del partido para la segunda parte.
El Barça, en la segunda parte, pese a que rectificó la posición de Xavi, le costó un horror volver a entrar al partido y a excepción de un chut lejano de Messi, las piernas no respondían, y todo hay que decirlo, el Getafe defendió muy bien y aprovechó el mal momento físico de los delanteros culés.
Finalmente, en una jugada tonta y justo después de que entrara Keita por Thiago, Valera metió un gol de córner que valió los tres puntos de forma inmerecida.
El Barça después mereció empatar de sobras, pese a que en algunos momentos hubo precipitación y que Messi no podía con sus botas y tanto Pedro como La Pulga, la tuvieron en el descuento pero ayer no era el día del Barça, fue una noche para olvidar.
Hoy los críticos tendrán el terreno abonado para discutir decisiones, o el bajo estado de forma de algunos de nuestros delanteros o por qué Messi tiene que jugar todos los minutos, pero antes de quemarlo todo, una actitud muy barcelonista, todo sea dicho, habrá que pensar que el Barça de Getafe es el mismo de San Siro o el mismo que ha goleado a todos los equipos que han pasado por el Camp Nou, que en 38 partidos pueden pasar muchas cosas y que el rival, hasta este momento, todo le ha salido de cara. Habrá que plantearse también lo difícil que es ganar 4 Ligas seguidas, cosa que solo ha pasado una vez en la historia del club, sobre todo después de haber ganado la Champions que te obliga a jugar todas la Supercopas y el Mundial de Clubs.
La suerte ha sido esquiva este año en el tema de lesiones y en momentos puntuales pues el Barça debió ganar al Sevilla y ayer no mereció perder y las ocasiones que en otros años iban dentro este año van al palo, y por ello no hay que flagelarse demasiado.
Sería de necios pensar que la Liga desde ayer,no está un poco más difícil y que un tropiezo en el Bernabéu sería definitivo a falta de una vuelta entera, pero esos que dicen que los seis puntos con el Madrid es una diferencia infranqueable son los mismos que otros años decían que el Madrid podía recortarla fácilmente cuando éramos nosotros los que llevábamos la ventaja, “son solo dos partidos” decían.
El Barça solo tiene que ganar los tres partidos que le quedan de Liga incluyendo el del Bernabéu y no olvidar lo que pasó a noche como advertencia de lo que se puede encontrar en muchos estadios y ganar el título que le queda en Diciembre para que los que ahora estan tan felices, lo dejen de estar, aunque sea por unas horas…
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