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Yoyalodije

Senat del Barça

En efecto, mi abuelo fue ‘senador’ (murió teniendo el carnet de soci número ‘63’) pero, desgraciadamente, pertenecía a ese 80 y pico% de senadors con movilidad reducida que no podían asistir. Las anécdotas debían de ser de alguna Assemblea de Compromisaris. Pero @uaveu63 ya os ha descrito perfectamente la naturaleza de semejante aquelarre nuñista: un día (en realidad se reúnen dos veces al año) para que la Junta haga creer a una serie de yayus trasnochados que son muy importantes; Bartomeu repitiéndoles que ellos son los propietaris del club; los directivos atendiendo durante horas sus soporíferas e intrascendentes quejas (que si la peste del puesto de frasfurts de mi Boca me va directamente al seient, que si el vídeomarcador desde mi zona no se ve,…); el momio Cardoner escuchando infinidad de anécdotas sobre su abuelo; y el directivo ese bronceado propietario del Nuba y que no sabe ni una palabra de catalán haciéndose fotos como ‘guapu’ oficial de la Junta para las sositietas.

Lo relevante de este Senat es que Bartu anuncie ante su voto cautivo, y sin la presencia de medios, que tienen una oferta de patrocinio por el Estadi de 100 millones cuando públicamente, y en toda la documentación oficial del proyecto, declaran que un tercio de la inversión (200 millones) debe ser sufragada por la compañía que ponga su nombre en el Camp Nou, y que una empresa norteamericana dedicada a estas cosas, y que contrataron expresamente, les dijo que el patrocinio del Camp Nou valía al menos 300 millones. Resultaría indignante todo esto si no fuese porque ya sabemos de qué pie calza esta Junta de trileros.

Pero seguro que con Laporta estas reuniones tenían más miga, con cientos de sosis y sus esposas escandalizados por su condición de divorciado (“Sanyó Laporta, que el Cuní diu que a vostè la dona l’ha fotut de casa i ara dorm en un matalàs a l’avantllotja del Camp Nou. Això és intularapla”) y echándole en cara su vida disoluta (“ascolti, que un President del Fumbol Club Barcelona no pot sortir amb pelandrusques”).

Dicho todo esto, gran parte de mi basalunisme fue transmitido, siendo un niño, a través de mi querido (sosi)yayu: entrar furtivamente en el despachito de su casa y quedarme maravillado analizando toda la memorabilia culer que guardaba (carnets antiguos, diplomas, banderines, placas de plata entregadas por el Núñes con foto incluida con el Chusep Lluis y la Maria Lluisa, el pin de oro con el escudo por los 50 años de sosi); las anécdotas sobre los ‘cuixots’ de Kubala cuando lo veían en directo en el viejo Les Corts; acompañarles a las ballades de sardanas que hacían cada Mercè en la explanada polvorienta del Camp Nou pre-llambordins; el purillo con el que obsequiaba al portero del Camp Nou mientras yo pasaba por debajo del torno; la lámina de cerámica, con su nombre grabado, colgada en el interior del Estadi, certificando su contribución como soci d’honor a la Fundació del club (como estaba en Tribuna, y es la única zona a la que tenemos restringido el acceso los sosis de los Goles y Lateral, desconozco si aún permanece allí); ir a cenar expresamente a su casa para ver los partidos europeos del Barça (no sé por qué, recuerdo especialmente un 2-2 contra el Bayern en la UEFA del último año de Cruyff con la camiseta verde y nevando intensamente); enorme etc.

Por cierto, para que os hagáis una idea de la camiseta MEYBA blanca que os comentaba el otro día (le faltaría la característica ‘cenefa’ de las mangas). Aunque las coderas acolchadas y el número y dorsal del pecho indican que esta era del portero de alguna sección, bien bonita que es: